Muchas de las tensiones musculares tienen un origen emocional. El circuito funciona de la siguiente forma: tienes una emoción fuerte, por ejemplo, miedo. Después te pones tenso. Liberas adrenalina y noradrenalina – que a su vez liberan cortisol, la hormona del estrés- preparando a tu cuerpo para luchar o huir. Hay una contracción muscular sostenida. Al disminuir el movimiento del músculo, disminuye la circulación sanguínea dentro de él y se acumulan toxinas. Empezarás a tener dolor, lo que aumenta aun más el tono muscular, retroalimentando el círculo vicioso. El estrés y la angustia, que son estados anímicos que perduran, vuelven esta tensión permanente. En un momento percibes que tienes la espalda dura y ni siquiera sabes por qué.
El cuerpo emocional, el energético y el físico están íntimamente unidos. Por esto, podemos establecer una relación entre las diferentes tensiones, las emociones asociadas y los chakras. El vocablo sánscrito chakra se traduce omo «rueda» o «disco». En el yoga, la meditación y el Ayurveda, hace referencia a las ruedas de energía en todo tu cuerpo. Hay chakras materiales (1, 2, 3,y 4) y del espíritu (5, 6, y 7). Salvo el primero y el último, todos son anteriores y posteriores, por lo tanto una tensión en la espalda, probablemente tenga su correlato en el estómago; y una tensión en el cuello, seguramente se conecte con alguna afección en la garganta. En artículos anteriores hablamos un poco más sobre los Chakras, sin embargo, los revisaremos brevemente:
¿Qué está sucediendo con tu Cuerpo?
Primer chakra, llamado chakra raíz o Muladhara, se ubica en la región del coxis. Tiene que ver con lo material, la supervivencia. Si hay un desequilibrio ahí, puedes sentir trastornos de ansiedad, miedos infundados o pesadillas.
Segundo chakra, Svadhisthana («la propia morada»), está ubicado en la región del sacro, está relacionado con el sexo y la conservación de la especie. Hay un pequeño musculo llamado piramidal que en ocasiones se tensiona. Ahí es cuando viene la ciatalgia, una inflamación del nervio ciático. Es probable que haya represiones sexuales, emociones retenidas respecto de la autoestima y la aceptación. Es decir, la culpa y la vergüenza.
Tercer chakra, también conocido como Manipura («gema brillante»), está en la región lumbar. Es una fuente de fuerza personal que regula tu energía guerrera y tu poder de transformación. También controla el metabolismo y la digestión. Está relacionado con el elemento fuego, el mismo que a nivel mental nos ayuda a digerir las emociones. Dolores en el lumbago, o problemas estomacales hablan de un problema para procesar situaciones.
Cuarto chakra, Anahata, se encuentra ubicado en la región dorsal, afecta el centro de los homóplatos, y el corazón. En general se relaciona con problemas afectivos. La angustia, la tristeza, se sienten en el pecho. Para no sentir esa emoción, nos vamos acorazando. Nos encorvamos más, entonces cargamos la parte alta de la espalda –hombros incluidos- y empezamos a respirar más corto. Entra menos aire (prana, energía vital) porque nuestra caja torácica está doblada y el diafragma no tiene tanto espacio para trabajar. Como resultado, nos sentimos más cansados y con menos energía.
Quinto chakra, Vishuddha, se localiza en la región cervical, afecta a la garganta y a la espina dorsal alta (zona de cuello y cervicales). La columna vertebral sostiene el cuerpo, es el eje de la vida. Por ella pasa la médula. Sobrecargarse con exigencias y expectativas irrealistas de sí mismo, significa sobrecargar este eje vital. Pero además es el chakra de la expresión, por lo tanto al bloquearlo quedan guardadas allí las cosas que no decimos.
Sexto chakra, Ajna, se encuentra entre las cejas. Es también conocido como el chakra del «tercer ojo»: es el centro de la intuición. Cuando está bloqueado tenemos trastornos psíquicas, problemas del sueño, alucinaciones y confusión.
Septimo chakra, Sahaswara, está situado en la coronilla y representa el poder de lo infinito. Se bloquea con el apego a todo lo que pertenece a este mundo de la forma, a lo material, trayendo consigo trastornos musculares, de la piel hipersensibilidad a la luz y fatiga crónica.
Entonces, ¿Cómo podemos liberar estas emociones?
Existen varias técnicas y terapias para limpiar el cuerpo de energías negativas y equilibrar los 7 chakras. Aquí te mostramos 9 Actividades para incrementar en tu día a día:
- Reiki: no tiene ningún defecto y solo te trae luz, amor y tranquilidad. En la internet, puedes encontrar varios terapeutas holísticos que preparan meditaciones y videos utilizando Reiki.
- Cristales curativos: son perfectos para dejar alrededor de casa, utilizar en joyas y prendas de vestir. Utiliza Ámbar para tensiones en la espalda alta y cuello, Agata para lumbago y estómago, Cuarzo Rosa para pecho y hombros, Amatista para la angustia, Fluorita para la migraña, Lapislázuli para el tercer ojo.
- Yoga: esta práctica sana, alinea y alimenta nuestro cuerpo energético. Además, nos ayuda a entender cada vez más nuestro cuerpo, percibir nuestra respiración y claro, equilibrar nuestros chakras!
- Meditación: método infalible para conectar con nuestro dolor y su origen. No te asustes, no es necesario meditar por horas, bastan solo algunos minutos para sentir un cambio significativo en el organismo. Esta técnica te permitirá conectarte con el Aqui y el Ahora.
- Llanto: no te la aguantes. El Ayurveda dice que las tristezas y los apegos se vinculan al agua, y para eso es muy importante sacar el agua del cuerpo.
- Transpiración: así como el Llanto, es una forma de sacar agua del cuerpo.
- Expresión: puede ser por medio del habla, la escritura, el canto. Sobre todo cuando está bloqueado el quinto chakra, es inminente expresar ese malestar de algún modo. Además posibilita un dialogo consigo mismo, ayuda a solucionar problemas y a colocar las ideas en orden.
- Respiración: es LA mejor herramienta. Gratis y siempre disponible. Siéntate en una posición confortable, inspira profundamente y visualiza esa energía vital «Aire» llegando a todos los rincones de tu cuerpo, expira lentamente y percibe tu cuerpo relajándose completamente al mismo tiempo que desechas toxinas, pensamientos y creencias negativas.
- Masaje Tántrico: Pues sí!, los Masajes Tántricos hacen el proceso mucho más simple y placentero. Es que está técnica deja en las manos de la terapeuta, o Masajista Tántrica, la responsabilidad mayor de relajar físicamente al cliente. La única responsabilidad que tienes, durante una sesión de masajes, es la de entregarte completamente al proceso, saliendo un poco de tu mente y permitiendo que sea tu cuerpo el único canal de comunicación entre la masajista y tú.
¿Identificaste posibles bloqueos?
Comienza hoy mismo a incluir estas técnicas a tu rutina diária, nuestras masajistas están disponibles para ayudarte a conectar rápidamente con tu punto máximo de relajación y conectar con tu energía interior y tu energía superior.